viernes, 22 de octubre de 2010



                                         LAMENTOS DE UN LOCO



En un manícomió había
un hombre anciano llorando,
al mismo tiempo reía
y a su vez así decía;
qué martirio estoy pasando
por decir lo que sabía.

Si por loco a mí me tienen
estando sereno y cuerdo,
cuantos debieran estar
encerrados sin piedad
y hacen de la gloria infierno.

No me tengan compasión
si vivo en este aposento,
compasión hay que tener
a los que van contra el bien
y andan por las calles sueltos.

Señores. ¿Estoy yo loco
si a esas fieras compadezco?.

                        P.GALLEGO

No hay comentarios:

Publicar un comentario